El pasado miércoles, con motivo de la celebración de la Semana del Mayor en Valencia de Don Juan, se vivió una jornada inolvidable en Riaño. La actividad fue organizada por el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan desde la Concejalía de Servicios Sociales, dirigida por Donata Álvarez de la Varga.
Ya en Riaño, el grupo visitó algunos de sus lugares más emblemáticos, empezando por la Plaza de los Pueblos, un espacio simbólico donde columnas con los nombres de las localidades desaparecidas rinden homenaje a sus raíces. Luego vieron la Iglesia Parroquial y recorrieron el Museo Etnográfico de Riaño, una joya que revive las tradiciones, costumbres y modos de vida de generaciones pasadas. A través de objetos antiguos, escenas costumbristas y elementos históricos como lápidas vadinias, el museo permitió a los visitantes realizar un viaje en el tiempo, comprendiendo cómo fue la sociedad que habitó estas tierras.
A continuación, el grupo visitó el monumento “El Silencio de las Campanas”, un conmovedor homenaje a los pueblos del antiguo valle de Riaño, hoy sumergidos bajo las aguas del embalse. Allí, las campanas originales de aquellas iglesias calladas por el agua siguen resonando en la memoria colectiva. La última parada fue la Ermita de Nuestra Señora del Rosario, donde un guía explicó su historia y simbolismo.
El punto culminante de la excursión fue el esperado paseo en barco por los Fiordos Leoneses. Un trayecto de 8 kilómetros de ida entre montañas y aguas cristalinas ofreció una experiencia serena, accesible y profundamente inspiradora, con vistas que parecían sacadas de una postal. Esta navegación permitió a todos conectar con la naturaleza en estado puro desde una perspectiva única.
Tras la actividad, los participantes disfrutaron de un delicioso almuerzo en un restaurante típico de la zona. La tarde finalizó con tiempo libre para realizar compras, pasear o explorar otros rincones de Riaño a su ritmo.
Esta actividad, además de reforzar la convivencia, sirvió para descubrir el patrimonio leonés y homenajear a nuestros mayores, verdaderos pilares de la comunidad.