Museos coyantinos “YoMeQuedoEnCasa”: Mantón de Manila

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Pieza: Mantón de Manila

 

Lugar de origen: Comarca de La Valduerna

Cronología: Finales del siglo XIX

Conservado en: MEPL Museo Etnográfico Provincial de León. Préstamo temporal para la exposición La Moda Elegante.

Esta pieza que os mostramos hoy es propiedad de la Diputación Provincial de León. Forma parte de la colección del Museo Etnográfico Provincial de León y es probablemente una de sus piezas más conocidas. Fue elegida como imagen de la portada de la publicación correspondiente a esta institución dentro de la colección que editó en 1993 La Crónica 16 de León dedicada a los “Museos y colecciones de León”.

Se trata de un mantón cuadrado de crespón de seda negro con bordado polícromo a mano, a punto pasado plano con hilo de seda de dos cabos, con motivos florales y animales. Está rodeado de una estrecha cenefa vegetal, que enmarca la composición. En cada una de las esquinas hay una gran flor en la que reposa un ave exótica de gran tamaño. Este es el motivo principal del bordado. El campo central está totalmente bordado. Partiendo del motivo principal se despliegan motivos vegetales y florales que ocupan la parte central, entre los que se pueden apreciar figuras zoomorfas características de estas prendas, como mariposas y pájaros. El mantón posee un importante flecaje, realizado con hilo de seda de dos cabos, de más de 50 centímetros, con un precioso trabajo de macramé.

El Mantón de Manila es probablemente la prenda de vestir femenina que mejor representa la imagen de la mujer española. De uso exclusivamente burgués pasó a convertirse en seña del vestir popular de todas las provincias de España.

El “Mantón de Manila” tiene una pequeña mentirijilla dentro de su nombre, ya que aunque todo nos haga pensar que se trata de una artesanía filipina, realmente la procedencia de esta magnífica prenda es china. Su origen es incierto, son varias las hipótesis sobre como comenzó a elaborarse, para que se utilizaba, etc. Sabemos que se realizaban en la región de Cantón, centro neurálgico del comercio chino. Desde esta zona, portugueses, holandeses, españoles, ingleses y franceses, importaban a sus respectivos países las ansiadas mercancías chinas. España tenía su base en la ciudad de Manila, capital de la Capitanía General de Filipinas, dependiente del Virreinato de la Nueva España, probablemente por eso le conozcamos con esta denominación. Desde esta ciudad partía el famoso Galeón de Manila, también denominado Galeón de Acapulco o Nao de China, que transportaba las mercancías chinas hasta España, a través de una ruta por las islas Marianas, Alta California y Acapulco, en la costa pacífica de México. En esta ciudad se hacía un gran mercado y muchas de estas prendas se quedaban en territorio americano. Las mercancías que estaban destinadas a España se trasladaban por tierra hasta el puerto de la ciudad de Veracruz, en la costa atlántica, desde donde partían hacia el puerto marítimo de Cádiz o el fluvial de Sevilla, donde finalmente se descargaban. Esta travesía, entre Filipinas y España, se realizaba varias veces al año, y fue posible gracias al descubrimiento del tornaviaje por Andrés de Urdaneta.

Los mantones hacían su periplo metidos dentro de primorosas cajas de madera, algunas de las cuales eran tan exquisitas como los propios mantones que protegían. En la exposición tenemos una caja de un Mantón de Manila que hemos datado hacia 1870, y que procede de la localidad de Toral de Los Guzmanes.

Durante gran parte del siglo XIX el elevado coste de esta prenda las hacía prohibitivas para el mundo popular, solo estaban al alcance de muy pocas personas. En el último tercio del siglo, debido a la mayor oferta de estos mantones, su precio descendió notablemente, lo que propició que algunas mujeres del mundo rural se pudieran permitir este lujo. En muchas ocasiones era el regalo perfecto para que la novia estrenara en su boda, y luego luciera para las ocasiones más especiales.

En España, dado el gran aprecio que se les tenía a estos mantones, se abrieron talleres para su réplica, destacando los asentados en Andalucía y en Cataluña. También se realizaron réplicas hechas en lana, lo que abarataba los costes, incluso se llegaron a reproducir los motivos ornamentales de los Mantones de Manila labrados o estampados sobre lana o algodón.

Para finalizar, como dato curioso, comentar que a finales del siglo XIX y principios del XX, se elaboraron Mantones de Manila con aplicaciones de nácar, marfil y metales preciosos, que eran cosidas como elementos decorativos sobre el mantón, la mayor parte de las ocasiones reproduciendo las facciones de los personajes bordados en los mantones. Tenemos constancia de que en Valencia de Don Juan existieron algunos de estos mantones dentro de familias acomodadas de la localidad.

Si os gustan los Mantones de Manila os dejamos un enlace para que veáis algunos de los que conserva el Museo Nacional de Artes Decorativas.

http://ceres.mcu.es/pages/ResultSearch?txtSimpleSearch=Mant%F3n%20de%20Manila&simpleSearch=0&hipertextSearch=1&search=simpleSelection&MuseumsSearch=MNAD%7C&MuseumsRolSearch=16&listaMuseos=[Museo%20Nacional%20de%20Artes%20Decorativas]